En esta nueva sesión hemos aprendido la importancia de la evaluación, pero no una evaluación basada única y exclusivamente en exámenes y calificaciones, sino en otros métodos como pudiesen ser exposiciones, juegos y exámenes online, etc. Ahora ya no se evalúa por conocimientos, sino por competencias, que se pueden medir a través de indicadores de logro como pueden ser las rúbricas o escalas de evaluación. Por otra parte, vemos la importancia de los portfolios para evaluar a los alumnos, una evaluación continua. A pesar de lo que pudiésemos creer, no existe un único tipo de evaluación, sino tres: la diagnóstica, la sumativa y la formativa, y otras tres formas de evaluar: autoevaluación, heteroevaluación y coevaluación. Esta última forma es importante para fomentar la cooperación entre los alumnos.
Todo esto nos es muy útil a la hora de nuestra futura carrera como docentes ya que podemos diseñar rúbricas para evaluar diferentes competencias, además de haber aprendido a hacer formularios de Google y descubrir diferentes herramientas digitales para evaluar, como pueden ser Kahoot o Quizlet. Estos contenidos los hemos aprendido gracias a la clase magistral del profesor y a la práctica (realizando el formulario, por ejemplo) y se puede emplear en la docencia para saber identificar estándares de aprendizaje, saber qué competencias se trabajan con esos estándares y diseñar herramientas para evaluar, y, además, hacer partÃcipes a los estudiantes en la evaluación, con las diferentes fórmulas de evaluar.